El asunto de Isabella; la chica a la que mi hermano Edward no podía leerle la mente, me tenía sumamente… ¿Interesada? No, esa no era la palabra…era algo que me había absorbido completamente. El que la hubiera visto anteriormente en una visión no podía ser casualidad, eso me lo repetía a cada momento. De manera que me había puesto a vigilarla exclusivamente a ella. Sabía que estaba cerca de descubrir algo…
Mientras pasaba por esto me encontraba sentada en un sofá del salón de la mansión, excesivamente inmóvil. No sabía donde se encontrarían todos, salvo de Jasper que estaría en el bosque supuse, pero sacando eso, no tenía idea…y tampoco estaba pensando en eso exactamente.