En mi primer día de instituto [Libre]

El primer día de instituto había sido duro.
Mi familia me había llevado allí en coche y luego a dirección, para coger mi horario y un pequeño mapa para que no me perdiera entre los distintos edificios de clases.
Algunas de esas clases las tenía totalmente sola y otras con ellos.
De momento no pasó nada extraño, muchas miradas extrañas cuando decían mi apellido en la lista de alumnos pero nada más. Todos aquellos chicos y chicas desprendían un olor tan tentador... pero se lo prometí a mi familia y ellos confían en mi, asique no me dejé llevar por las ganas, simplemente intenté sacármelo de la cabeza.
Era hora del descanso, asique fui hacia la cafetería donde me dijeron que esperara allí a que llegaran.
Cogí un plato con un sandich y una manzana y me senté en una mesa retirada. Hacía tanto tiempo que no comía algo humano.... ya hasta se me había olvidado como masticar; lo miré timidamente pero no comí nada, prefería otro tipo de alimento.
Vi varias personas que se giraban a verme y me puse todavía mas neviosa y rezaba que vinieran ya...

Primer dia del instituto...primer día del purgatorio. Creo que después de hacer pasado tantas veces por la preparatoria y por la universidad ya estaba más que harto. Pero si queríamos convivir con los humanos había que hacerlo. Eramos los bichos raros, y no porque nos cosiderasen feos, sino por el hecho de que no hablabamos con nadie que no fuera de nuestra familia. Que suerte tenían todos esos humanos de no ser nuestros amigos. En el almuerzo me dirigí hacia la cafetería en busca de mis hermanos. Entré y el lugar estaba repleto, como todos los dias. A lo lejos visualicé a Jasper y a Amy y fui hacía ellos; pero a medio camino escuhé a alguien pronunciar mi nombre. Volteé y vi a Jessica Stanley hablando con otra chica. Sus grandes ojos marrones me llamaron la atención de inmediato. Eran muy extraños, profundos y reveladores
quienes son esos? preguntó a su acompañante en voz baja
a esos son los cullen , y ese de alli es edward cullen , no se mezclan con los demas porque estan juntos le contestó Jessica a la chica que llevaba por nombre Bella. Me quedé un momento viéndola, tratando de leer su mente y asi saber que pensaba sobre la trillada respuesta de Jessica; y digo trillada porque todo el mundo aqui la había escuchado más de una vez. Me dirigí hacia mis hermanos y me senté en una silla. Pero la chica seguía mirándome. Jessica seguía con su conversación tonta interna...pero no podía escuchar nada de esa chica de ojos marrones y rostro en forma de corazón. Me frustré y volteé con mis hermanos, tratando de percibir algun pensamiento de la chica sin que ella lo notase.

Me alegré muchísimo de ver a Jazz y le sonreí hasta que se sentó.
Olí a una humana y parecía la nueva estudiante de la que todo el mundo hablaba. Era guapa, castaña de ojos castaños, pero sin duda olía mejor que cualquier humana de ese pueblo.
Varias veces miró a nuestra mesa y yo miré a Jazz.

-De momento bien hermanito-le dije amablemente-Sin ningún problema, ¿y tu?

Luego la puerta se volvió a abrir y vi entrar a mi otro hermano Edward. Pasó a lado de la chica nueva y vi como se le quedaba mirando, entonces sonreí. Era normal que un humano se fijara en mi familia, resaltaban aunque no quisieran.

-Hola Ed, que tal?-le pregunté sonriente.

Luego me eché un poco más adelante para poder hablar con Jazz y Ed en bajito para que nadie más lo oyera.

-¿Esa es la chica nueva de la que todo el mundo habla? En las clases no se ha hablado de otra cosa-les dije y miré especialmente a Ed que la miraba de vez en cuando, se notaba que también le gustaba.

Amy me sacó de mis pensamientos
-hola Amy-le sonreí a medias-si, es ella-le contesté-me parece realmente interesante-me dirigí a Jasper...no puedo leer su mente-mascullé en tono bajo para que nadie a exepcion de mis hermanos escuchase

Escuché lo que dijo Ed en voz bajita al igual que yo y mi mirada se fue sola de nuevo a la chica.
¿Cómo podía ser que Edward no leyera el pensamiento a un humano? Era prácticamente imposible, con todos nosotros podía sin ningún problema.
Miré a Jazz y me encogí un poco de hombros.

-¿No puedes saber lo que piensa? ¿Cómo puede ser?-pregunté en el mismo tono bajo con el que él había preguntado.

Sacudí la cabeza y me encogí de hombros
-no lo se Amy..percibo todos los pensamientos de aquí menos los de Bella-me giré y volví a mirarle, en verdad frustrado por no poder poner en práctica mi don. Ella me miró y no puedo decir si fueron segundos o minutos los que nuestras miradas se cruzaron..en verdad a mi me parecieron horas.

Observé como Alice llegaba a nuestra mesa y tapaba los ojos de Jasper; pude leer su pensamiento...acaso ella ya sabía lo que pasaba con aquella chica? miré fijamente a Alice y luego miré de reojo hacia Bella, volviendo a mirar a Alice y preguntandole si ella lo sabía. Le era facil leer mi mirada.

Vi llegar a Alice y le tapaba los ojos para que él adivinara de quién se trataba.
Sonreí al verla llegar y la saludé con entusiasmo. Verme rodeada de mi familia era lo mejor, con ellos podía ser yo misma y eso me hacía feliz.
Vi las miradas entre Alice, Ed y la chica nueva.
Luego en otra mesa vi a otra chica morena que nos había mirado un rato pero luego se había puesto a comer su manzana y a leer un libro. La observé un rato, nunca la había visto por el pueblo asique lo mismo también era nueva.

-¿Qué tal el día Alice? El mio no ha estado mal para ser el primero, pero sin ningún problema-dije orgullosa de que no hubiera pasado nada con ningún humano.

Volví a mirar a la mesa donde estaba aquella chica y vi que volteaba la vista para ver a Ed. Entre ellos había algo claro, se gustaban. Bueno, todo podría pasar, un vampiro y un humano podía llegar a algo, si no, yo no hubiera nacido, eso estaba claro. Miré a Ed.

-¿Por qué no te acercas y te presentas? No parais de miraros-le dije bajito y con buena intención. Le sonreí cariñosamente y volví a poner mi mirada en aquella chica y luego a la otra que miraba a través de su libro a todas las mesas.

Acababa de salir de Biologia y estaba realmente aburrida, ya habia visto lo mismo por mas de un siglo y ya me lo sabia de meoria. Antes de llegar a la cafeteria fui para el baño a retocarme, aunque no lo necesitara era mas un habito. No me encontre a nadie por el camino y la gente me miraba raro ya que me encontraba sin Emmett, estaba aguera de Forks con Carlisle asi que en estos dias me iba a encontrar sola. Entre a la cafeteria y el olor de tanto humano me molesto un poco, me dirigi a nuestra mesa rapidamente y me snete al lado de Amy.

-¿como ha estado tu primer dia? -le sonrei y vi que Alice y Edward miraban hacia un lugar, dirigi la vista hacia alli y me di cuenta que era la nueva chica, de repente sneti un gran odio hacia ella y la fulmine con la mirada sin importar lo que me dirian mis hermanos.

Escuché atentamente la explicación de Alice...asi que ya la había visto?? ya había visto lo que iba a pasar? necesitaba hablar con ella en privado para saber más. Sonreí ante lo que dijo Amy
-no creo que sea lo más conveniente-volví a mirar a Bella; no podia dejar de hacerlo. Al cabo de unos minutos llegó Rose y vi como miraba a Bella...su mirada hacía notar frivolidad y odio-basta Rose-mascullé entre dientes realmente irritado

Se abrieron las puertas de la cafetería y entró Rose. Caminó con gran elegancia hasta nuestra mesa y se sentó a mi lado; yo la sonreí.

-Mi primer día ha estado muy bien-la dije muy contenta-¿y el tuyo que tal?-la pregunté, aunque obviamente llevaba en ese instituto bastante tiempo.

Luego vi como Rose fulminaba con la mirada a la nueva chica, no se si ya la conocía o no pero lo cierto es que ya la caía mal.
Ninguno de nosotros tocamos la comida de las bandejas, la verdad es que la comida humana no me atraía para nada, asique la aparté de mi lado y seguí mirando por toda la cafetería. Dentro de un momento estaríamos de nuevo en las clases.
Miré de nuevo a la chica que estaba leyendo el libro que estaba mas retirada de nosotras. Me intersaba bastante y notaba que no era una humana normal, estaría atenta por si acaso. Luego volví a mirar a la chica castaña la cual no para de mirar a mi hermano y reí por lo bajo.