Vagando en soledad...

-Sí, de ''mujeres'' y de tu padre. -concluí con una leve sonrisa- No tienes idea de lo que hablábamos, ¿no? -pregunté curiosa-

- Nada de nada, pero solo observaba risitas entre mi Padre y mi Madre...- dije colocandome la capucha grisacea.

-Y de tu tía, aunque se ha mantenido más callada que tus padres. -dije y luego volví a fijar mi mirada en él mientras andábamos- Tu madre es muy amable conmigo, tal vez demasiado.

- Mi madre siempre es asi, es muy cariñosa creo que demasiado para se una Vulturi, ya que todos piensan que somos malos...- dije mirando para alante cuando nuestrras miradas se encontraron.

-Bueno... Hay Vulturis malos, Vulturis buenos... Y luego estás tu, el mejor Vulturi. -dije mordiéndome el labio inferior sin poder evitarlo, era una extraña manía que tenía desde que era humana- Y tu padre Aro... Me ha parecido de lo más amable dándonos el día libre. Creo que ésto ya es oficial para ellos... -dije mirando nuestras manos unidas-

- Creo que no hay secretos en este castillo- dije riendome- Se lo tomaron bien no?-



off: Mama, Padre me dara otra vez la charla..... jajajajajjajajajajja no aremos nada "Raro"

-¿Secretps? Éso con tu padre es imposible, ya lo sabes. -dije divertida- La verdad es que se lo tomaron para bastante bien, esperaba reacciones distintas, en cambio tu tía y tus padres parecían encantados... Sinceramente, me sentía bastante intimidada por sus miradas fijas en mí cuando entraste. -musité-

Off: Sí sí... Aro ya nos dió la charla de las precauciones y todo éso... Ahora veo a Aro con otros ojos... jajajaja!

- Creo que nos miraban nuestras reaciones.- dije riendome.- Bueno que hacemos?- le pregunte .


off: jajajajaj eso fue buenisimo

Me quede callada durante ntoda la conversacionde Aro y los demas, ya se notaba que heidi estaba algo incomoda y no la queria poner mas. Los dos niñios se marcharon y al parecer mi hermano y su esposa se olvidaron de mi presencia ya que se pusieron contentos sin ningun problema.

-ay que asco -les dijo en tono de broma y sali del cuato pra ejarlos a solas

-Si , la verdad esque me recuerdan a nosotros , practicamente por eso les deje-dije un poco riendome al recorar la cara de Alec -Aunque Alec parece que sospeche que planeo algo por ponerme asi, como no esta acostumbrado a verme asi , la verdad esque a tenido suerte de pillarme de buen humor querida -dije sonriendo y despues la bese y abrace fuertemente .

off: Espera... como que con otros Hojos!!?? , y como que nada ''raro''??!! ¬¬ (xDD lo ultimo esta claro que lo entiendo pero lo primero a que viene!!?)¬¬

Off: ¿Cómo que a qué viene? Pues viene a que la alegre y normal Heidy Vulturi quedó en shock al atender en tus clases sobre sexo! xDD Qué fuerte... Acudiré a tí cuando tenga dudas, suegro... jajaja! Apuesto a que pensaste que ''con otros ojos'' me refería a de una manera distinta al padre de mi novio xD

-Mmmm... Qué hacer si nos prohiben visitar a los Cullen... Pues, vayamos al jardín, si te parece; me gustaría poner la planta que me regaló tu madre en un lugar soleado. -dije mirando la planta que tenía en mi mano libre- Es preciosa, ¿no crees?

- Al lado de Usted presiosa, esta flor pierde toda su hermosura, Pues vayamos al jardin querida- dije tomadola dela mano.

Me aferré fuerte a su mano y esbozé una delicada sonrisa mientras seguíamos andando hasta llegar al jardín. Todo estaba en flor, los bellos pétalos de distintas tonalidades refulgían con fuerza al darles el sol. Sin molestarme en ponerme la capucha salí al jardín, soltando la mano de Alec para poder colocar la planta en el lugar apropiado para su manutención. En aquel momento me dí cuenta de que mi piel brillaba como si de una pieza de joyería se tratara; me acerqué a las hermosas flores y pasé mi mano por cada una de ellos, dejando que su embriagador olor me llenara por completo.

Me apolle en unos de los pilares que habia en la entrada y obserbe la piel de Heidi, esa hermosisima piel que brillaba cuando el sol acariciaba su cuerpo, Coji envidia del sol al poder tocar su piel,fue pasajero, una sonrisa se dibujo en mi piel. Miraba con la dulzura que acriciaba cada una de la flores que habian en ese colorido jardin.

- Eres hermosa a la luz del sol-

Dejé unos instantes las flores y me acerqué a Alec, el cual yacía apoyado en unos de los antiguos pilares del castillo, cualquier persona que le hubiera visto hubiera pensado que era una hermosa estatua esculpida por el mismísimo Miguel Ángel. Me coloqué frente a él y le miré ensimismada mientras pasaba mi dedo índice por su labio inferior.
-Si soy hermosa entonces podré acoplarme a tí, aunque no creo poder estar a tu altura. -susurré y le dí un leve beso, luego me separé un poco de él y jugueteé con el fino cordón que sobresalía del cuello de la capucha.- Tu madre a hecho un excelente trabajo en éste jardín, algún día me gustaría ayudarla en éstas cosas. -dije pensativa-

-Sabes creo que ella estara encantada- dije cojiendo un mechon de su pelo y jugando con el.- Sabes señorita creo que estas mas alta que yo en eso,- dije riendome, la coji de la cintura y lla levante para que estubiera mas alta que yo.- Lo ves- dije riendome, la puse en el suelo pero no quite mi man de su cintura.

-La señora Sulpicia es muy cercana, me trata como a una hija, se me hará muy raro todo éste cambio, pero aún así no me arrepiento de nada ocurrido con anterioridad. -murmuré sonriendo antes de que me tomara por la cintura y me elevara.-
Una vez lo hizo mi sonrisa de ensanchó aun más, mostando más felicidad de la imaginada hasta entonces; con él me sentía como si estuviera en una especie de nube, una nube casi irrompible de la cual no quería desprenderme jamás.
-Vale, vale, dejémoslo en que los dos estamos a la misma altura, así ninguno será más hermoso que el otro, ¿trato echo? -pregunté tendiéndole la mano sonriente-

- Trato echo- dije cojiendola de la mano y acercandola a mi, Nuestros labios se encontraron y la bese apasionadamente

Me tomó de la mano y me acercó a él, haciendo que nuestros labios encontraran. Pasé mis brazos por su cuello, rodeándolo para alargar unos instantes aquel momento. Mientras nos besábamos con febril pasión jugueteaba simultáneamente con su rubiasco cabello. Después de unos momentos alargando aquel beso liberé sus labios de los míos.
-Te quiero. -susurré y le abrazé fuerte-

- Creo que no te podria expresar con palabras el amor que siento por ti- correspodi cuando aquel magnifico beso acabo.- Y ahora que te apetece realizar?-

Quedé pensativa y alzé el rostro para mirarle.
-Mmm... Estar toda la eternidad contigo... Aparte de éso, juraría que pocas cosas más. ¿Algunas sugerencias, caballero? -pregunté sonriendo-

-Eso ya lo tienes- respondi sincero- Pues podriamos ir al lago y hablar ¿te apetece?-

-Tentadora propuesta, no puedo negarme si eres tú quien me lo propone. -dije y dejé de abrazarle para tomar de nuevo su mano- ¿Vamos?

- Vamos- dije decidido. Empezamos a andar y llegamos al lago, era precioso hasta cuando los mira unos ojos como los mio.